“LA NIÑA” APORTARÁ ESTACIONES MAS TEMPLADAS A PARTIR DEL PRÓXIMO
VERANO
El ciclo de temperaturas que ocasiona la formación de la corriente
ENSO en el Pacifico ha concluido durante 2010. El último ciclo se
inició con el perihelio terrestre de 1998, momento de máxima
acumulación de calor principalmente en el Pacífico, el gran
termorregulador de nuestro planeta, entonces se observó un incremento
máximo de +0,8 grados centígrados sobre la media terrestre. Dicho
periodo ha finalizado en el perihelio de 2010 con un nuevo máximo del
ENSO y un incremento inferior a +0,7 C., si bien durante 2010 se han
dado temperaturas medias más elevadas que en 1998, lo que ha
comportado una mayor actividad de las circulaciones meridianas de las
corrientes.
Cuando tiene lugar la corriente del gran Niño, como ha sucedido en
2010, es evidente que las circulaciones meridianas provocan mayor
intercambio térmico entre las áreas frías de los polos y de las zonas
templadas y cálidas, lo que ocasiona frecuentes invasiones de aire
polar, de ahí el frío invierno boreal de inicio y finales de 2010.
Otra cosa, es lo que puede acontecer a partir de 2011, que
probablemente sea lo contrario. Una vez vaciado el calor acumulado en
el Pacífico, lo que ha sucedido en 2010, se formará la situación
inversa en los próximos años, con el fenómeno “La Niña”. La falta de
afluencia de energía desde las zonas cálidas creará, sobretodo a
partir de 2012, corrientes continuadas paralelas, que en la Península
Ibérica ocasionará lluvias en la costa atlántica y, por el contrario,
probable sequía en las costa mediterránea.
A nivel global, descenderán bastante las temperaturas medias de la
Tierra durante los próximos años, ocasionando inviernos y veranos
menos extremos en las zonas templadas y más fríos en los polos.